Conste que me parece que este a este señor le gusta más una cámara que oírse hablar a sí mismo, así que no me extraña que caiga mal en el Eurogrupo. Habla dando lecciones. Comprendo que en seis meses mucho no se puede hacer desde la que era su cartera para ver efectos pronto, pero igual no era el momento tampoco de ir de listo. Ha hecho un trabajo muy digno y otro tan digno deja hecho al irse.
En cierta forma me da pena, ya que parece un ministro con casi más presencia y yo diría que casi con más carisma que el propio Tsipras. Permanecerá prácticamente como un icono. Y no descarto que vuelva.
Y vo ya escribir lo que mucha gente ha de escribir hoy, que deberían tomar nota muchos políticos españoles que se aferran al butacón como auténticas garrapatas malas. Incluso por el único «delito» de hacer mal su trabajo, deberían largarse.
Los griegos han dado más lecciones de dignidad en dos días de lo que nos interesa reconocer.
De cualquier forma, las negociaciones siguen. Veremos si era sólo una cuestión de lucha de «machos alfa» llegar a un acuerdo y mejorar la situación de la gente griega una vez apartado Varufakis. Y una vez sacado el «no» en un referendum que no les interesa en Europa, y que sólo habrá encendido los ánimos.
Pero me preocupa especialmente que ayer se hablara de «ayuda humanitaria» para Grecia: